OTRA VUELTA AL CIRCULO PASO 2

Su tristeza era tanta que decidí llevarlo a otro lugar. Intentar al menos por un momento calmar sus penas, me desnudé, lo acaricié, lo desnudé, me senté sobre esa carne dura, muy dura. Hice todo lo que pude para que olvidara tantas nubes que rondaban sus pensamientos. Lo único que encontré fue un cuerpo seco, un "algo" sin alma.

No se conecta. Su cabeza esta en otro cosmos mientras me lo tiro, quizás piensa que su mamá está aburrida, que sus hermanas están trabajando, que Amparo está brava.

Finalmente lo saco de mi:

- El problema es tuyo, sé que tienes problemas pero... ¡estás llevado! Tu verás si te quedas así. Cuando estás con Amparo, piensas en mi, me llamas, te preocupas de mis cosas.

Cuando tuviste la posibilidad de estar conmigo, no lo aprovechaste, y volviste con Amparo. Me retiro de este juego de Ping Pong. Ya me mamé.