2.28.2006

CUMPLEAÑOS DE RODRI

Adivinen donde celebramos....
en Abnocto!
25 - 02 - 06








Muchas gracias a todos
Lo pasamos muy bien

Feliz cumpleaños 28 - 02 - 06

(dentro de un mes es mi cumple)

2.24.2006

AMAME



Casa Babylon

Febrero 23 de 2006
pistas

2.22.2006

Mi Loquita Anyelik


Una muñeca baila en el salón, da vueltas y ríe, atrapada en un mundo oculto, un mundo sin llanto, sin frío, baila, baila y ríe de nuevo...
Muñequita tomada en gráciles lazos invisibles, estas cansada?, tan dulce, tan tranquila, abstraida, solo baila y vuelve a reir.
Todo el sitio es para ti, estás sola, y los demás desaparecen en tus píes.
De pronto él se para frente a tí. Ahí está, lo miras y le sonríes... él... te mira y sonríe. Solo puede decir:
- Te ves tan hermosa, te ves muy feliz, así deberías de estar siempre, me encanta como te ves de contenta. ¿cómo estás?
- Estoy muy bien.
- Que linda. Mi loquita Anyelik, Mi loquita Anyelik, Mi loquita Anyelik, Mi loquita Anyelik...
Una nube pasa y ella apasible la monta y de nuevo se va a bailar.

2.16.2006

LA PRIMERA VEZ


Finalmente los astros se alinearon y salí con Nicolás. Pasamos por D. a la universidad.
Tenemos dos opciones: Nos vamos a la rumba de dj XXX (muy buena rumba), o vamos a otro lado y nos damos la rumba de la vida.
Pensé solo en plata, esas rumbas deben ser caras.... mmm... creo que darnos la rumba de la vida nos sale mas barato.
- Está bien, la rumba de la vida.
- Pero, solo si estás dispuesta a pasarlo muy bien.
- Si, listo.
Esa noche conocí a Frodo. Si, a mi Señor Frodo. Un amigo de D.
Todos querían fumar Mary Jeane. Caminamos por una cuadra bastante oscura y muy sola. Nicolás sacó una pipa pequeña, creo que la llenó, la prendió, fumó un poco y se la pasó a Frodo, él me la pasó a mi.
Y en mi cabeza se movian tantos pensamientos.
Veinti tantos años, 5 de universidad, con amigos en las drogas y nunca quice probar nada. Recuerdo los clichés que nos meten durante años los medios. Las charlas en el colegio sobre sus efectos. Los drogadictos son lo peor, son malos, roban, y hacen que su familia sea una desgracia.
Y si probando esto me enloquesco. No se que pueda hacer, quizás cosas que en estado normal no haría, Todo aquello que tu voluntad y tu conciencia controlan.
Tengo la pipa en la mano, y las llevo a mis labios, me imagino es como fumar cualquier cigarrillo.
Inhalo el humo y no siento humo, no siento nada.
Seguimos caminando y hablando. Recuerdo los mucachos que caminan igual por las calles, mientras fuman un porro. ¿Ahora soy como ellos? Todos cambian un poco y ríen por cualquier pendejada y yo como estoy? Normal. Mi primera vez y no siento nada. No se porque se rien, no me parece gracioso, pero ellos están felices.
Seguimos por toda la séptima, vamos a un lugar de música electrónica. Prenden de nuevo la pipa, ya no tengo tanto miedo. Fumo de nuevo, y de nuevo no siento nada. Esa vaina no me hace ni cosquillas.
Llegamos al sitio. Bailamos, me siento muy cansada, con sueño, me arden los ojos, creo que esta rumba no va a durar mucho.
Nico se encuentra con un amigo que se iba de "shopping", así que le pidieron hacer compras para todos.
- Estoy cansada.
- Calmate un rato mientras viene mi amigo.
- Ven y tomamos mientras tanto.
Lo miro mientras sigue la música, creo que me gusta un poco, pero no me ha tocado ni un dedo, no siento nada en el ambiente. Otro sorbo de Smirnoff, estoy cansada, estoy cansada, estoy cansada, estoy cansada, estoy cansada, estoy cansada.
D. se acerca y me pide un beso.
- No.
Insiste... Nicolás dice que va al baño.
- Listo.
Me acerqué a D., nos besamos, como siempre, cuando separé mis labios de los suyos veo a Nicolás en un rincón parado. Se dió cuenta, creo que hasta acá nos llegó la rumba.
El amigo de Nicolás llegó justo en ese momento y también se dio cuenta.
- ¿Tú no venías con ella?
Nicolás con cara de aburrido le respondió que sí.
- Tomate una de estas y arma tu rumba.
En su mano tiene los juguetes, se sienta en la barra e intenta no mirar a ningún lado.
D. se acerca de nuevo. Nicolás ya nos vió, ya no importaba, volví a besarlo. ¿Que perdía? ¿Que ganaba?
Nos besamos de nuevo y eso le afectó. Ya no quería bailar, ya no quería hacer nada. De pronto se paró y le pidió a D. la plata de la entrada. Con eso compró un par de cervezas. Yo estaba bailando y le pregunté:
- Y tu amigo ¿Ya llegó?
- Si acá las tengo.
- ¿Tú te vas a tomar una completa?
- ¿qué?
la música está muy fuerte y no se ni que me está diciendo.
- No, no soy capás.
- Entonces tomémonos mitad y mitad.
Abrió la mano y la ví. Era una pepa triangular.
- Toma cómete una.
- nooo.
Me la acercó a los labios.
- Pártela por la mitad.
- no.
- Yo me como la otra mitad.
La cogí con los dientes y la rocé con la lengua, sentí un sabor amargo. Era horrible. ¿A qué sabe cualquier droga? Creí que esto debía saber rico y por eso les gustaba y ese fuerte olor... a droga. Cogí la cerveza y la pasé entera. Él empezó a masticarla (no puedo creer que la mastique) y mientras sonriendo decía
- Que rico, siéntelo, es el sabor de la locura.
- ¿Bueno y ahora qué?
- Ay que esperar.
- ahhh????
- Por ahí en media hora.
- ¿Falta media hora?
- Sí.- Contestó con risa
- Creí que la tomabas y de una te prendía.
Bailábamos muy cerca, él intentaba explicarme.
- Cuando estés en lo mejor de la rumba, que estés bien loquita posiblemente te van a dar ganas de vomitar.
Porque no me dijeron eso desde el principio, ya me imaginaba haciendo el show, vomitando en mitad del lugar.
- ¿Y ahí que hago?
- No, solo haces con el cuerpo como el amague de que vas a vomitar y ya, eso es lo que yo siempre hago.
- No, que delicia. ¿Y eso da siempre?
- No, solo la primera vez.
Eso quiere decir que solo lo voy a sentir yo. ja, que bien. Seguimos bailando y él me miraba y me preguntaba cada rato ¿Ya? Yo le hacía señas indicando que aun no sentía nada o por lo menos no me parecía. Me hizo tomar un poco de cerveza. Miraba el reloj esperando el momento de sentir algo.
El tiempo pasaba lentamente... 10 minutos... 15 minutos... 20 minutos... ya eran casi 30 minutos y solo podía sentir el peso de todo un día de trabajo.
En cuestión de unos 10 segundos percibí una explosión de colores en todo lo que me rodeaba. Miré al piso y lentamente abrí los ojos para reconocer el lugar. Todo estaba mucho más iluminado, todos los colores brillaban. Parecía como si toda la paleta CMYK la hubieran modificado a RGB.
Me sentí mucho mejor, miré a Nicolás y cuando le sonreí él lo supo. Es como si adquirieras otra forma de ver el mundo. Era totalmente consciente de lo que hacía, no tenía perdida de la memoria, ni del control de mis movimientos. El cansancio se fue sin darme cuenta. Sonreía y sentía la energía correr por todo mi cuerpo. Vi a las personas bailar y perfectamente podía reconocer: ese está drogado, ese no, ese tambien, ese está muy llevado.
Nicolás se me acercó y empezamos a besarnos... frente a Dustin. Su beso lo sentí tan bien que no me importó nada. El mundo desapareció por completo. Lo besaba, y lo besaba y lo seguía besando, nos abrazamos, sentí la suavidad de su cabello y él me apretó contra su pecho, mientras me besaba me acariciaba. Sus labios eran totalmente deliciosos, expertos. No fue como la primera vez que lo hicimos.
Cuando me separé de él empecé a sentir frío, cada vez mas fuerte. Se me bajó la tensión. Y sentí entonces esa presión en mi estómago, esa nausea natural que viene cuando el cuerpo reconoce ese agente extraño que te está intoxicando. Empecé a sudar frio. Todo sucedió en un minuto.
Me miré en un espejo, vi esa palida desconocida reflejada frente a mi.
Cuando me di la vuelta Nicolás le decía a D. que nunca mas me fuera a dar mas besos
- ¿Cuento con eso hermano?
D. no tenía muchas ganas pero finalmente aceptó.
Le sonreí y empezamos a hablar.
- ¿Cómo te sientes?
- Súper bien, una delicia.
- ¿Seguro?
- ¡Claro!
- Esto podemos hacerlo muchas veces mas pero si no te vuelves a besar con D.
Me dio risa, tan rápido poniendo reglas?
- ¿Qué qué?
- Que no vuelvas a besar a D.
- ¿Y porqué?
- Porque no me gusta.
- mmm bueno...
Bailabamos, nos besábamos, D. se nos acercó y empezó a decirnos algo. Por el ruido yo no le escuchaba.
- ¿Qué que?, ¿Cómo?
Cuando por fin logré entender...
- Ay por fis dale un besito a mi amigo ¿si?
Me pareció tan chistoso, volteé y miré a su amigo bailando frente a una pared y volví a mirar a D. que le repetía lo mismo a Nicolás.
- ay que le dé un beso a mi amigo que está todo triste.
Nicolás le decía con la cabeza que si.
- Si lo oyes? - le pregunté a Nicolás.
No le había entendido nada cuando D. lo repitió vi como Nico abrió los ojos y le dijo.
- No, que le pasa ¿Cómo ella le va a dar un beso a su amigo?
- Ay Nicolás ¿si?- dijo D.
- Que no hermano.
Por fin respondí
- No.

2.15.2006

PLAN DOMINGUERO


No solo los jugadores
derraman sangre en los campos de entrenamiento,
tambien las porristas y groupies del equipo.
Mas fotos del domingo en la página de la Turba.

2.14.2006

DESPEDIDA DE SOLEDAD






1. La despedida fue en Abnocto (Como por variar)
2. NO estoy en ninguna foto
3. Si alguno quiere que quite su foto AVISE
4. Nadie pida envios a correo
5. Si, publiqué la foto de la discordia.

2.08.2006

PARA PATTON


No se porqué te pensé tanto mientras estaba en Flander´s
(será algún subliminal)
cada vez que nos miramos el uno al otro me repite siempre lo mismo

2.03.2006

AMIGO


Pasé a buscar a Edilberto, lo extrañaba.
Ya que estoy acá querido amigo vengo a cobrarte aquella media de aguardiente que me debes por aquella insulsa apuesta que hicimos algún día. El se ríe y dice que luego me la paga. Llegan algunas amigas y vamos todos hasta Papyros.
A las once de la noche, las viejas se empiezan a ir y quedamos los dos con Nadia. Avanzada la noche, la confianza y los tragos hice lo que quería hacer desde hace mucho tiempo, lloré.
Le comenté algunas de mis razones para haber dejado a mi novio, mi amigo se dedicó a decirme lo que pensaba:
- Bien hecho, llore por boba, eso le pasa por boba, él es un muy buen tipo y solo una boba como usted es capaz de dejarlo, boba-.
Después de un rato me vio tan mal que me abrazó con fuerza y puso mi cabeza sobre su hombro para consolarme. Estando allí por un segundo me di cuenta que nunca me había acercado tanto, sentía profundamente su aroma. Casi estuve tentada a acariciarle el cabello para sentir que tan suave era.
Me ardían los ojos y las mejillas por el calor de mis lágrimas. Nadia ya estaba cansada y quería irse, la acompañamos hasta la puerta de su casa y caminamos hacia la avenida.
Cuando está borracho, suele insistir por una cerveza mas, entramos hasta otro chuzo de rock.
Pedida la cerveza un incómodo silencio nos acompañó un par de minutos. Por primera vez solos, tan amigos, tanto tiempo y sin saber que decir. Empiezo a contarle lo primero que se me cruzó por la cabeza:
- ¿No te había contado que terminé de leer mi libro?
- ¿Cuál?
- Sexus, de Henry Miller.
- ¿Qué tal?
- Buenísimo.
- ¿Y a ti te gusta?
- ¿Qué?
- El sexo.
- Claro que me gusta.
- ¿Por qué?
- La verdad no se porque, pero si me gusta mucho.
- ¿Y yo?
- ¿Tu que?
- ¿Yo te gusto? - maricaaaa! qué es esto? amiguito, nos sumergimos en caminos peligrosos! No debo pensar mal, él lleva solo mucho tiempo, de pronto le hace falta que se lo digan- claro... tú me gustas... tú te mereces una buena vieja...
- ¿Qué te gusta de mi?
- ...No se... - La conversación cada vez mas rara... o mas clara?
- A mi usted siempre me ha gustado.
La verdad no pude evitar el sonreír, y dirán que mucha perdida, vagabunda, falsa, lo que sea, pero no pude dejar de reír, me parecía inaudito, lo imaginaba, pero no creí que alguna vez lo dijera. Y mientras tanto, él siguió:
- Yo la deseo... la deseo desde hace tiempo... y también la he respetado... por que usted era la novia de mi amigo y él es un tipazo... pero hasta acá me puedo aguantar.
Con cara de escéptica, lo miraba y parpadeaba, y cuando lo hacía, me ardían los ojos. Hace poco estaba llorando por mi exnovio, lloraba y él me consolaba, ahora me dice todo esto. Mientras él hablaba, yo incómoda intentando ausentarme de sus palabras, miraba a un punto fijo, algo así como borde guardaescobas, esquina superior derecha.
Apoyé mi cara sobre mi mano derecha, bloqueando así su mirada insistente, mientras mi ego quería continuar en este juego.
Lo necesitaba, tantos días lo pasé tan mal, estuve tan triste y ahora mi amigo me dice todo esto... y así continuó:
- Angie, yo he soñado con usted, yo he tenido sueños húmedos con usted.
- Edilberto, pero yo he sido su amiga, o no he sido su amiga?- (y eso es totalmente cierto, yo nunca lo ví como algo mas, yo ni lo quería ver como un hombre, casi que lo veía como un ser asexuado)
- Si yo se, pero es que usted cree que no la he visto? yo conozco muy bien su cuerpo, cuando fuimos al Peñón yo la vi, yo vi sus senos, su cintura, su cola, sus caderas, Yo la he visto...
- Edilberto ¿yo no he sido una amiga incondicional?, ¿por qué me dice todo esto?
- Porque yo quiero estar con usted, yo quiero saber a que saben sus labios, y yo creo que usted en la cama lo debe hacer muy rico. Quiero que me dé un beso.
- No. - Respondí sin pensarlo
- ¿Porqué no? - Preguntó
- Porque no quiero.
- Yo no le he gustado entonces. ¿Acaso usted no se fijaba en mi? Pues...¡Entonces! ¿Que es lo que tiene que pensar?
- Todavía mis ojos me sabían a dolor, a recuerdos, y él pretendía que me montara de un momento a otro en semejante vídeo. Yo lo quiero como un amigo. Aunque... de pronto empiezo a acordarme de algunos momentos en que quizás pudo ser diferente... - Creo que algunas veces sentí celos. - Le confesé.
- ¿Cuando?
- Cuando usted salía con viejas con las que yo no estaba de acuerdo, y en especial cuando viajamos con Claudia.
- Yo si lo sentí, y además me lo dijeron.
- ¿Qué te dijeron? - Eso no lo podía creer.
- Que usted estaba enamorada de mí.
- ¿Quién te dijo eso?
- Varios lo dijeron.
- Dime alguien, al menos uno solo que lo haya dicho.
- Mckencie.
- ¿Qué te dijo?
- Que usted no me miraba de una forma normal y era porque yo le gustaba y usted era muy obvia.
- No lo creo. - Y en realidad no lo creo.
- Sí.
- ¿Y cuando te empecé a gustar yo? - Pregunté. Espíritus del mal alimenten este ego dolido y desgastado.
- Desde que la conocí usted me gustó, pero por ser la novia de mi amigo no quería pensar en eso, después como dos veces tuve sueños húmedos con usted, así que ahí se hizo más obvio, y después me masturbé y llegué a sentir muchas cosas pensando en usted.
Gracias amiguito que elocuentes y profundas palabras. Entonces dije:
- No te creo - Y era en serio, no le creía.
- Es que piensa... uno se masturba pensando en Natalia París, Tatiana de los Ríos, en modelos. Pero para masturbarme pensando en usted? es porque de verdad me gusta mucho.
Ya estaba como aburrida, estaba tan tarde, lo saqué del lugar. Todo el tiempo insistió en que le diera un beso, pero no le seguí la cuerda nunca, entonces me hizo prometer que cuando nos diéramos el primer beso ese día haríamos el amor. Lo prometí segura de que ese beso no se iba a dar nunca.
Hacía mucho frío así que le eché sobre los hombros la bata del colegio. Cuando me acerqué, me pidió que lo abrazara, para darle un poco de calor. Lo abracé sin traerlo a mi cuerpo, conservando la distancia y volteando la cara hacia un lado para que no me fuera a besar.
- No me abrace así, tengo frío, abráceme y acarícieme la espalda.
No lo iba a hacer... hasta que de pronto dijo:
- ¡Claro, que fastidio abrazar a Edilberto, que asco!
- Ya deja de decir pendejadas.
- Entonces regáleme un abracito. ¡Angie, regáleme un abrazo!
- Yo lo abrazo pero usted no hace nada.
Cuando lo abracé me apretó con mucha fuerza, me agarró de la ropa, mientras intentaba separarme, acarició mi espalda, metió su mano bajo la blusa y tocó cuanto más pudo... me separé con mas fuerza y lo empujé para que siguiéramos caminando. Cuando entre abrazos y pendejadas llegamos a la avenida me di cuenta de algo con lo cual no había contado.
Ya era muy tarde, tan tarde que a esa hora no pasaba ni un solo colectivo, el primero que pasaba había que esperarlo hasta las cinco de la mañana y eso... si pasaba temprano. Nos sentamos en el andén sobre la avenida y seguimos hablando bobadas. Edilberto me acercó la cara y nos besamos, una y otra vez, sentí sus labios extraños pero cálidos, sus besos eran tan diferentes a los labios que acostumbro besar.
Seguimos hablando como si nada hubiera sucedido y de pronto él dice:
- Marica la cagamos, marica la cagamos.
- ¿La cagamos?, ¿cómo que la cagamos?
¿Qué le pasa al mundo, el cosmos está invirtiendo las ecuaciones y eso es lo que generó semejantes fallas? pasaron algunos minutos de silencio, se me pasó la piedra y me coge un ataque de risa, al acordarme de aquellas sabias palabras: Marica la cagamos, marica la cagamos. Puede que la hubiéramos cagado pero ¿por qué no lo pensó antes? Me besa, me habla, y ahora pretende que nos echemos látigo juntos.
Si metió las patas, lo mínimo que pudo haber hecho fue disfrutarlo, ¿Pero esto? El de nuevo empieza a hablar:
- Si yo tuviera la oportunidad de hacerle el amor, se lo haría hasta que le doliera el cuerpo de tanto hacerlo, no la dejaría salir de mi habitación y en una noche me vendría dentro suyo unas cinco veces por poquito. La apretaría y mordería por todos lados. ¿Alguna vez has pensado en hacer un trío?
- Si, creo que todos lo hemos pensado alguna vez...
- ¿Y te gustaría hacer un trío conmigo y con alguien mas?
- No. ¿Sabe porque? Porque usted fue mi amigo desde hace mucho tiempo, y yo lo quiero mucho, lo quiero tanto, que si alguna vez le hiciera el amor se lo haría con todas las ganas pero a usted solo.
Por fin, mi colectivo, adios, gracias.

BloGalaxia la blogoteca
imagen
Directory of Personal Blogs  Bitacoras.com Suscribir con Bloglines